1. Chernobil (Ucrania). Su aire contiene uranio, plutonio y otros metales, así como partículas de radioactividad desde que tuvo lugar la catástrofe nuclear en 1986.
2. Dzerzhinsk (Rusia). Las fábricas de armamento de los tiempos de la 'Guerra Fría' han dejado su estela en forma de gases y productos químicos orgánicos altamente tóxicos.
3. Haina (República Dominicana). Los restos de una planta de reciclaje de baterías de vehículos, ya clausurada, afectan todavía a una población de 85.000 habitantes.
4. Zabwe (Zambia) Los niños de la segunda ciudad más grande de Zambia registran en su sangre los efectos de un área con altísimos niveles de contaminación debido a las numerosas industrias que la pueblan y de las explotaciones de cobre.
5. La Oroya (Perú). Desde 1922, adultos y niños de esta ciudad minera están expuestos a las emisiones nocivas de una planta de fundición.